¿Qué buscas en los viajes? ¿Qué esperas encontrar?

Viajar es una manera de vivir, es como la vida misma. Depende de lo que uno busque o esté capacitado para encontrar. En mi caso, principalmente busco hurgar la diversidad de la existencia, porque aunque la condición humana sea la misma en todos lados, en cada sitio se diferencia de acuerdo a sus necesidades y en el modo en que manifiesta sus pasiones. La cultura es la que define al individuo y la que da sentido a cada vida. Y eso es lo fascinante. A la naturaleza le da lo mismo que te mueras vos o un bicho bolita. Es la sociedad la que le da importancia al sujeto. Lo fascinante es cómo se manifiesta esa importancia y las variaciones que tiene entre un lugar y otro.

Viajar es un nacimiento perpetuo, es quebrar una vida de repeticiones. En lo personal, viajamos para testimoniar las diferentes problemáticas del hombre en sus diferentes contextos, y las soluciones que propone o encuentra para enfrentarlas. Nos atraen los modos y maneras en que la gente se junta y se convoca para hacer distintas cosas: los proyectos autogestionados, los emprendimientos colectivos, las propuestas independientes que proponen otro mundo posible.

El tiempo es la única riqueza que todos poseemos sin distinción. Nadie puede comprarlo ni venderlo, manejarlo o detenerlo, es inmune a las reglas del poder, del interés y del dinero. Y la vida toma sentido por el uso que del tiempo hacemos. Si no los valoramos, nuestros días se suceden monótonos e iguales, uno atrás de otro. Si en cambio sabemos que tarde o temprano nos moriremos nadie podrá hacer de nuestra vida un negocio para llenarse los bolsillos.
La publicidad nos enseña a temer la muerte, a retardarla, a negar el paso del tiempo, a no mencionar nuestra condición de seres temporales. Se desdeña la vejez y se idealiza la juventud como si fuera la época dorada de la vida. Las arrugas se operan, las canas se tiñen, la edad no se dice, los años se esconden. ¿A quién le sirve todo esto? ¿A los vendedores de productos que nos dan permiso para ser jóvenes? Esconder la edad no retardará la muerte. Si en cambio despertamos a nuestra fugacidad, la muerte es un antídoto para no perder el tiempo. No tiraremos la vida por la borda tratando de juntar dinero y trataremos de dar un sentido a nuestra vida. Bueno. Viajar tiene que ver con esto. Es un modo de nacer todos los días, una manera de decir que valió la pena pasar por acá.