¿Qué es un mochilero?

Imagino que habrá tantas definiciones de esta palabra como personas que viajan de este modo. Pero a mi manera de ver, nada tiene que ver con llevar una mochila en la espalda. Creo que un mochilero es sobre todo un caminante, un peregrino, un viajero que se diferencia categóricamente de lo que vendría a ser un turista. La diferencia entre ambos creo que es notable. El turista suele viajar limitado por el tiempo y se ve atrapado en una contradicción que lo condiciona y que convierte su recorrido en un itinerario vertiginoso, en un mero traslado geográfico bastante restringido, porque en su afán de ver la mayor cantidad de cosas, termina viendo muy poco. Su recorrido acaba siendo una recopilación de anécdotas pintorescas o una colección de fotografías de sitios que sólo ha conocido de una manera efímera y apresurada, sin entrar en contacto profundo con el lugar que ha visitado. Viaja de un modo más planificado, con una ruta generalmente establecida. Por el contrario, creo que el viajero es más espontáneo y más contemplativo, porque su viaje está más vinculado a un proceso de asimilación y aprendizaje. El viajero está más desligado de los circuitos y los relojes, y su periplo está más orientado a entrar en contacto con la gente y sus historias. Mientras que para el turista generalmente la gente es parte del paisaje, para el caminante es decisivo el encuentro con los demás. De todos modos, la explicación que estoy tratando de hacer es solamente una definición aproximada y bastante general de los modos de viajar que he visto en la gente. No es en definitiva ser turista o mochilero lo que te hace profundo. Al fin y al cabo, es la gente quien le da sentido al recorrido.